Sobre Malala

Siempre supe que me dedicaría a la joyería, no sólo porque mi familia se dedica a ello desde hace años y lo conozco muy bien, sino por la fascinación que me produce la belleza de las perlas cultivadas y las piedras semipreciosas. Desde pequeña he imaginado mil formas de combinar las perlas y las piedras de una manera diferente a cómo las veía en los escaparates. Quería, y sigo queriendo, crear joyas favorecedoras y ponibles, que no pasen de moda y que no estén metidas en un cajón.

Quería, y sigo queriendo, crear joyas favorecedoras y ponibles, que no pasen de moda y que no estén metidas en un cajón.
Compro por todo el mundo perlas cultivadas, piedras semipreciosas, cierres, cueros, sedas, plata, cualquier detalle que pueda incorporar a una joya y después en mi tienda taller lo termino en forma de collar, pendientes, pulseras, broches...
Me gusta pensar que a las mujeres a las que van dirigidas mis piezas son mujeres con personalidad que buscan diferenciarse con los complementos , y que sienten la misma magia que yo siento, ante la maravilla de la naturaleza, cuando admiro el brillo de una perla cultivada o los distintas tonalidades que puede tener una piedra semipreciosa.